El Gobierno quiere incentivar el alquiler de vivienda para que España se acerque a los estándares europeos. Para ello, baraja agilizar más los procesos de desahucio de los inquilinos morosos reformando la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU). El sector se queja de que los propietarios tardan entre 8 y 14 meses en recuperar sus casas tras los impagos, lo que es un lastre para que más caseros opten por arrendar. El parque de viviendas en alquiler en España representa el 17% del total, frente a un promedio de entre el 30% y el 40% en la Unión Europea.
Las empresas que intermedian en este mercado demandan más medios humanos y una reserva de juzgados especializados en estos asuntos para poder hacer efectiva esa agilización del desalojo.
Las mejoras que quiere realizar el Ejecutivo vendrán por el establecimiento de plazos más cortos y estrictos para poder desalojar a los inquilinos morosos y de medidas que hagan que los tiempos puedan cumplirse. Se descarta introducir más incentivos fiscales al alquiler.