La bajada de precios y la necesidad de bancos y grandes empresas de lograr liquidez a través de la venta de activos no han sido motivos suficientes para animar las compras inmobiliarias en el mercado español. En 2012, la inversión inmobiliaria no residencial se redujo un 45% hasta 1.806 millones de euros, según el área de Real Estate de Deloitte. Este desembolso se repartió entre 52 operaciones entre las que destaca la compra de la sede de BBVA en Barcelona por parte del dueño de Inditex, Amancio Ortega, que se fraguó en los últimos días de diciembre. El importe de la compra fue de alrededor de 100 millones.
Es, precisamente, el segmento de oficinas, junto al de locales en calle, el que más volumen aporta, unos 505 millones, aunque muy alejado de las cifras de años anteriores. En 2011, esta área inmobiliaria registró un volumen de 970 millones. En hoteles, se han producido 10 operaciones de compra, con un volumen de inversión de 295 millones, un 64% menos que el año anterior. En centros comerciales, las adquisiciones han caído un 47% hasta los 1.051 millones.
cambio hipoteca
Fuente:Expansión