El diario económico Expansión abre con esta información su edición de hoy. Explica que las inmobiliarias cotizadas tienen 40.000 millones de euros en créditos pendientes y que las entidades financieras han dado el primer paso para evitar el colapso del sector negociando con las grandes inmobiliarias el retraso de pagos por un importe de 7.500 millones de euros. Los bancos señalan que no les interesa la liquidación de sociedades ni quedarse con sus inmuebles. Prefieren asumir un aplazamiento de los pagos. Por su parte, las inmobiliarias reclaman además acceso a la financiación porque, de lo contrario, aseguran que puede complicarse la devolución de los préstamos, pero el grifo de nuevos créditos está prácticamente cerrado.
Desde una entidad bancaria comentan que “se va a hacer todo lo posible por recuperar los préstamos. Se van a dar facilidades, entre ellas, flexibilizar los plazos de la deuda. Pero no se va a financiar nada que no se quiera financiar. El riesgo deberá asumirlo el sector inmobiliario”. Desde una compañía del sector se insiste en que “si no dan las herramientas que te permitan devolver el crédito, la amortización de la deuda puede retrasarse hasta el infinito.
Fuente: Expansión.
