La crisis financiera restringirá de forma notable la concesión de créditos para adquisición de vivienda durante los próximos dos años, según las previsiones de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA). Las cajas no se muestran optimistas respecto a la duración de la tormenta financiera; en su opinión, las turbulencias podrían presentar momentos críticos en los próximos tres meses, pero incluso después de superados, los efectos en la actividad bancaria se prolongarán. Uno de los impactos más destacados del proceso para el negocio financiero será la fuerte contracción del crédito. El último balance de las cajas –difundido ayer- ya revela una contracción considerable de los préstamos destinados a la compra de vivienda: hace un año crecían a un ritmo cercano al 29% y en la primera parte de este ejercicio ha descendido hasta el 18%. La tendencia continuará durante 2008 (estimando para entonces un crecimiento del 12%) y podría extenderse hasta el tercer trimestre de 2009. En créditos al consumo también ha descendido los crecimientos, pasando del 20% al 16%; en cambio, los préstamos a las empresas mantienen su fortaleza, con tasas del 32%. Aunque la CECA asegura que las actuales turbulencias financieras no tendrán consecuencias destacables en el sector, sí admite que los mercados tardarán cerca de dos años en quedar “completamente limpios” de los coletazos de la crisis. Hasta entonces, las cajas de ahorros mantendrán “alta la guardia”, lo que supondrá un endurecimiento de las condiciones para conceder los préstamos.
El otro gran efecto derivado de la falta de liquidez de los mercados financieros que predicen las cajas es una feroz guerra del pasivo para captar recursos que les permitan financiar, sin recurrir a emisiones o al interbancario. Esta estrategia provocará un estrechamiento del margen financiero, lo que previsiblemente repercutirá en los beneficios. Las cajas sostienen que se debe optar por la prudencia y el alza de las provisiones. Otro aspecto destacable de la actividad de las cajas es que la cobertura de estas entidades a los créditos dudosos ascendía en julio al 250%, frente al 63% de la media europea. Esta diferencia demuestra que el sector “ha hecho los deberes”, blindándose en la medida de lo posible frente a los vaivenes de los mercados”. Si bien las cuentas de las cajas reflejan un ligero aumento de la morosidad, del 0,69% al 0,78%, cifra permanece en niveles históricamente bajos y contrasta con el 3% de media de la UE.
Información destacada en todos los diarios consultados. En La Razón se explica que el artículo “El Banco de España y las cajas refuerzan los controles ante el acecho de la crisis” que durante este mes se han intensificado los contactos al más alto nivel entre el organismo supervisor y la CECA para analizar el alcance del crack crediticio en el mercado español y arbitrar, en su caso, medidas de emergencia para evitar que la desconfianza se instale en el sistema financiero español. Esta información se destaca también en Cinco Días.
(El Mundo. Página 42. 4 medias columnas).
